Son hogares saludables y permanentemente limpios gracias a la ventilación mecánica controlada, que filtra y renueva el aire interior continuamente, con una altísima calidad de aire, muy bajos niveles de CO₂, sin polvo, polen ni alergias, libres de patologías de uso gracias a que sabemos cómo evitar los riesgos de humedades por condensación y otras patologías, y confortables como ninguna al mantener la temperatura constante las 24h. Todo sin apenas consumir energía para ello, o incluso llegando a producirla (NZ⁺).